Escuela Superior de Hombres
"LEONCIO ARANEDA FIGUEROA"

Página en defensa de la gloriosa "Escuela Uno" que algunos insensibles
pretender demoler, borrando así la historia viva de Cañete.

martes, febrero 28, 2006

ESCUELA 1: Su demolición sería un crimen de lesa patria

Sin lugar a dudas cuando las vacaciones nos llevan a la tierra que nos vió crecer, más allá de que nuestra zona pueda ser considerada un pequeño polo turístico, son muchas cosas que pasan por nuestra mente. Así lo corrobora Homero Altamirano en su crónica sobre sus vacaciones en Cañete, las nostalgias familiares, los encuentros, el Lago Lanalhue, alguna historia de sus playas, la subutilización del Puerto Peleco, la decadencia de la educación en Chile y, por supuesto la Escuela 1.

Al respecto, Escuela 1, la crónica de Homero publicada en Lanalhue Noticias (
Leerla acá...) en parte señala:

El día domingo participamos en la misa y romería al cementerio a visitar a Nene y al Pimpo junto a los ex alumnos del primer curso que el Profesor Ricardo Altamirano sacó al mundo allá por 1945 en la Escuela 1:

¿Alvear? ........¡Presente!
¿Camarico? ......¡Presente!
¿Ibáñez? ........¡Presente!
¿Concha?.........¡Presente!
¿Concha?......... Ausente
¿Pavez?..........¡Presente!
¿Seguel? ........¡Presente!

Y así....después de 60 años......los alumnos siguen junto a su profesor, fieles al juramento que hicieron de encontrarse cada año hasta que dure el aliento. El año 2004 habíamos participado también en este homenaje a nuestro padre y allí cantamos aquellas canciones que él nos enseñó a sus hijos, nietos y a sus alumnos:

“ Trees blancos lirios yo planté......”
“No puedo pasar a verte...No puedo cielito No....”

A propósito de la Escuela 1 y de la polémica que ha sido difundida por LN, pasé a visitarla y me dio gran pena ver el estado en que se encuentra. Las políticas neoliberales implantadas en nuestro país por la dictadura y que los gobiernos democráticos no han modificado en lo sustancial, están conduciendo la educación pública al abismo. No es la primera escuela que veo en este estado... hace algunos años nos juntamos los ex alumnos del Liceo en Talca y la impresión fue la misma: ventanas y puertas cayendo a pedazos, vidrios rotos, baños insalubres, bancas y sillas en estado deplorable. Debemos reaccionar y exigir que la Educación Pública vuelva al elevado nivel que tuvo, la obra de Aguirre Cerda, aquella de “Gobernar es educar”, con la Constructora de Establecimientos Educacionales, que dejó su herencia en nuestro pueblo y cientos de otros lugares de nuestro país; las escuelas formadoras de maestros de verdad y no “profes express”, en fin ...una política de Educación Publica... debe ser reformulada. El edificio en su estructura gruesa se ve bien y su demolición sería un crimen de lesa patria, puede ser restaurado y ampliado si es necesario. La actual mezcla de “estilos” en el que las ventanas que dan a la calle han sido “modernizadas” mientras las del interior, de madera caen en pedazos, debe ser corregida.

En realidad , lo que pasa con nuestra vieja escuela es el reflejo de la incultura que ha caracterizado a la clase dominante durante la mayor parte de la historia no escrita de nuestro país. Los dueños de Chile, los latifundistas, empresarios mineros y comerciantes, que miraban a Europa durante el siglo 19, solo por postura y no por convicción, no aprendieron nada de la cultura europea. Creían que hablando francés o construyendo palacios de mal gusto estaban a tono. Todo lo “modernizaron” y han destruido el patrimonio nacional.

El sistema de tranvías que existía en Santiago y Valparaíso lo desmantelaron y así lo hicieron recientemente con los ferrocarriles. El esfuerzo de miles de nuestros compatriotas fue tirado al tacho de la basura. Un ex alcalde de Valparaíso que conocí en Italia, comentaba cuando pasábamos diariamente por los centenarios adoquines de la vía Appia Antigua que unía Roma con Nápoles en los tiempos del Imperio Romano:

“ Y pensar que yo ordené levantar cuadras y cuadras de adoquines o los mandé a cubrir con asfalto, pues creía que ese sistema de carpeta era añejo y ahora nosotros transitamos por esta calle que ha sido mantenida en servicio por dos mil o tres mil años”.

Los ignorantes, prepotentes e incultos solo piensan en destruir y recomiendan demoler el único edificio que guarda la historia de varias generaciones de cañetinos y que junto con el edificio de la antigua Gobernación son el legado del hijo ilustre de esta ciudad que llegó a ser Presidente de la República.

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